Hoy viajamos a Cuenca
En nuestro afán por seguir viajando por España, y conocer nuestras ciudades y pueblos, hoy viajamos a Cuenca. Grupo Chapín, empresa de alquiler de autocares en Madrid, te recomienda esta ciudad, que es Patrimonio de la Humanidad, que está a tan solo 2 horas de camino desde Madrid y que tiene mucho encanto y cosas que hacer en ella.
Para ponernos en antecedentes, Cuenca es una ciudad que dista de Madrid a unos 170 km. Cuenta con una población de cerca de 57.000 habitantes y que como dato curioso, tiene la categoría histórica de ciudad, con los títulos de «Muy Noble, Muy Leal, Fidelísima y Heroica». Obtuvo el título de «Ciudad» de Alfonso X en 1257 y los de «Muy Noble y Muy Leal» en 1465, de mano de Enrique IV. Tras la Guerra de Sucesión, en la que Cuenca luchó a favor de Felipe V, éste le otorgó los títulos de «Fidelísima y Heroica»
El título más importante que obstenta Cuenca es el de Ciudad Patrimonio de la Humanidad otorgado por la UNESCO, y según fuentes del Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España, Cuenca es una realidad urbana sorprendente donde se enlazan los tiempos del pasado y los del presente, donde patrimonio cultural y patrimonio natural se complementan y ofrecen al visitante una oportunidad para sorprenderse.
Agua y piedra confrontaron durante milenios para construir la más formidable atalaya surgida en el territorio que habría de ser ibérico. Le bastaron a la Naturaleza dos ríos para trazar sus contornos, abrazarla, ahondar sus hoces y nutrir de verde su horizonte más próximo, en la que vivieron árabes y cristianos, y fue Alfonso VIII quien la sumó al reino de Castilla y la convirtió al cristianismo; así la mezquita se transformó en Catedral, el románico se trocó en gótico y se alzaron iglesias y conventos.
Si nos acercamos a esta magnífica ciudad, tenemos que visitar el Casco Antiguo de Cuenca y sus seculares barrios aledaños permanecen con idéntica fisonomía a la que en aquella época adquirieran. Muchos de sus más nobles edificios mantienen hoy la condición que les dio origen: conventos en los que aún impera el silencioso rezo de sus monjas de clausura, templos en los que se renueva a diario la fe de los creyentes, casonas blasonadas en las que se mantiene viva la memoria, el Ayuntamiento soportado en arcos que se abren para acceder a la Plaza Mayor. Otros, se han aplicado a preservar su incomparable patrimonio histórico y artístico, transformándose en sedes de museos, fundaciones y en el Archivo Provincial.
Pero por lo que se le conoce más, sin duda alguna, es por las «Casas Colgadas», encaramadas a la cornisa de la roca sobre la hoz del Huécar, las Casas Colgadas son símbolo indiscutible de Cuenca. Realizadas en mampostería, con sillares en las esquinas y asentadas en ménsulas, se asoman al río desde sus balcones de madera voladizos sobre el acantilado. Del conjunto de estas casas sólo tres son visitables: la casa de la Sirena que aloja un mesón donde degustar la tradición y las Casas del Rey que permiten el deleite del arte abstracto al mismo tiempo que la construcción interior de estas casas con su viguería de madera, una verdadera joya de la arquitectura popular.
Por todos estos motivos y muchos otros que podrás descubrir en la web de turismo, hoy viajamos a Cuenca, y si además lo haces en grupo, confía en Chapín como empresa de alquiler de autocares en Madrid.