La movilidad eléctrica avanza en todo el mundo, ya sea en forma de coches, autobuses o motocicletas. Cada vez más, los fabricantes son conscientes de la huella medioambiental que dejan los vehículos de combustión, por lo que están aportando soluciones de movilidad inteligente basadas en la electrificación del transporte. Los nuevos modelos de transporte compartido en coches o el bike sharing están centrando los esfuerzos de empresas y gestores públicos para descongestionar y reducir la contaminación de grandes ciudades.
Nuevas investigaciones arrojan que los buses con batería eléctrica son mucho menos contaminantes que los diésel o gas natural. Numerosos gobiernos locales de Estados Unidos están aumentando su flota de buses eléctricos públicos o tienen planes para hacerla 100% eléctrica en los próximos años. Partidarios y detractores de este modelo de buses aportan cifras contrarias sobre su relación coste/beneficio.
Los autobuses eléctricos están cobrando cada vez un mayor auge en todo el mundo, especialmente en Estados Unidos, donde su implantación está experimentando un gran crecimiento en los últimos tiempos. Una de las causas de este aumento en la adopción es la mayor sostenibilidad ambiental que aportan en comparación con otros modelos de autobús, como los diésel o gas natural.
Un reciente análisis llevado a cabo por la Union of Concerned Scientists (UCS) ha confirmado que, a lo largo de Estados Unidos, los buses eléctricos emiten menos de la mitad de las emisiones contaminantes que generan los buses de diésel o gas natural. Como muestra la gráfica, un autobús eléctrico estándar emitiría 1.078 gramos de CO2 por milla recorrida frente a los 2.680 de un diésel.
Sin embargo, las estaciones de recarga son fundamentales en el proceso de implantación y desarrollo de los vehículos eléctricos. Tanto el número de puntos de recarga accesibles como la potencia de los mismos, hoy en día son insuficientes, teniendo en cuenta las necesidades de las flotas eléctricas, y lo que es más importante, para hacer de la movilidad eléctrica una opción atractiva para el mercado.
El mercado de la producción de autobuses eléctricos cuenta con numerosos fabricantes reconocibles de diversas partes del mundo como los chinos BYD, King Long o Yutong, los europeos Solaris, VDL, Van Hool, Alexander Dennis Limited, Irizar o Solaris, americanos como New Flyer o Proterra o grandes grupos del sector automotriz como Volvo, Daimler o Scania. Además de estos fabricantes reconocibles, existen en Europa numerosos fabricantes de menor calado que ofrecen sus alternativas de autobuses eléctricos producidas en suelo europeo, en países como Rusia, Eslovenia, Polonia o República Checa.
Las flotas de autobuses dedicadas al transporte público compuestas por vehículos completamente eléctricos e híbridos enchufables crecen progresivamente en Europa. Según datos del último informe realizado por Statista sobre movilidad eléctrica publicado en julio de 2018, Reino Unido cuenta con la flota de buses eléctricos más grande de Europa, con 191 buses 100% eléctricos y 153 buses híbridos enchufables, haciendo un total de 344 unidades operativas a fecha de diciembre de 2017. A Reino Unido le sigue Países bajos, con una flota de 296 buses eléctricos, la más numerosa de Europa. En tercer lugar, encontramos a Alemania, con 176 autobuses eléctricos y 120 híbridos enchufables. España ocupa el noveno puesto, con una flota de autobuses eléctricos en funcionamiento de 61 unidades y de 42 híbridos enchufables, por detrás de países como Suecia, Bélgica, Polonia, Austria y Lituania.
Esta evolución y aumento de las flotas de autobuses eléctricos en Europa precisa de ajustes operativos para los operadores de estos vehículos. En los vehículos eléctricos, el mantenimiento de las baterías y de los sistemas de carga es un aspecto de crucial importancia para alargar la vida útil de vehículos y baterías, por ello, los fabricantes y empresas dedicadas en exclusividad a esta tarea están desarrollando nuevos sistemas de control, gestión y mantenimiento para que esta tarea sea lo más rápida, eficaz y eficiente posible.
Un ejemplo, entre muchos, de este desarrollo de nuevas técnicas de mantenimiento es la que ha anunciado el fabricante polaco Solaris en agosto 2018. Solaris Bus & Coach ha creado un sistema para racionalizar y respaldar soluciones de diagnóstico, mejorar las opciones de mantenimiento y facilitar el análisis de datos especializados derivados de vehículos mediante el equipamiento de un sistema de diagnóstico remoto llamado eSConnect, que permitirán al productor establecer una base de datos de información de rendimiento real que permitirá perfeccionar las soluciones aplicadas por el fabricante.
El sistema eSConnect se puede instalar en todos los vehículos eléctricos fabricados por Solaris, ofreciendo a sus clientes la oportunidad de trabajar con información básica que permite optimizar el uso de la flota. Los datos que recoge el sistema incluyen información posicionamiento de la flota de autobuses en términos de tiempo y ubicación, estado actualizado de la batería, kilometraje cubierto por un vehículo en un tiempo determinado, uso de energía y notificaciones sobre todas las baterías cargadas por completo. El sistema eSConnect ayudará en la identificación remota de posibles errores notificados por el vehículo en el panel del conductor, la supervisión de los parámetros de funcionamiento del sistema y la generación de estadísticas, como por ejemplo el número de ciclos de carga y el tiempo necesario para recargar las baterías en base al estado del vehículo.
No solamente los fabricantes de vehículos eléctricos están desarrollando estos sistemas de monitorización y prevención. Existen a nivel europeo y mundial empresas dedicadas exclusivamente a estas tareas. Un ejemplo de ello es la empresa holandesa Viriciti, con desarrollos en Europa y Norteamérica, y cuyo trabajo principal es obtener datos en tiempo real sobre la ubicación, la autonomía y el rango restante de una flota eléctrica para evitar problemas operacionales. Además, cuentan con herramientas de planificación de rutas para optimizar los recursos de los vehículos, favoreciendo la operatividad y ayudando a realizar mantenimiento preventivo de las baterías, evitando ciclos de carga innecesarios y optimizando los periodos de operación de cada vehículo. La empresa holandesa cuenta con suites de gestión integrables con otras aplicaciones de gestión de flotas, así como módulos dedicados a estaciones de carga simple y compuesta, optimizando los recursos del operador al máximo, y proponiendo un uso adecuado de las baterías de los vehículos para prolongar sus vidas y ciclos de carga.
Aunque vemos que ha habido avances en materia medio ambiental de parte de los gobiernos, fabricantes, productores de sistemas relacionados, sistemas de recarga etc, pensamos que queda mucho por hacer para descontaminar la industria del transporte a nivel mundial, con el fin de poder ofrecer a todos los ciudadanos de este mundo una mejora de calidad de vida.
Desde Chapín nos preocupa y tenemos muy presente el respeto y la preservación de la naturaleza, lo que nos lleva a la aplicación de políticas medio-ambientales y actuaciones para mejorar en este aspecto como:
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- Adecuación al Plan sobre gestión y vigilancia ambiental basada en la norma ISO 14001:2004, certificada por AENOR.
- Sistema de gestión y control de flota: A través del seguimiento ON LINE de la flota podemos optimizar los recorridos.
- Plan de gestión ambiental y formación.
- Motores de bajo consumo Euro V y VI.
- Motores menos contaminantes: La mayoría de nuestros vehículos son Euro V y VI, cumpliendo con la más estricta normativa europea.
- Gestor autorizado de residuos: Como exige la norma ISO 14001:2004, Grupo Chapín Autocares, dispone de un gestor autorizado para la recogida y gestión de residuos.
- Utilización de detergentes Biodegradables.
- Formación de conductores en conducción eficiente y en gestión ambiental.