Siguiendo hábitos correctos y poniendo en marcha un plan de eficiencia energética, las empresas pueden conseguir un ahorro medio del 26% en la factura mensual. Para ello, basta con seguir algunos trucos.
Lo primero que habría que hacer para reducir el consumo energético en la empresa es controlar la energía reactiva (la devuelta por los equipos a la red) y los consumos fantasmas o standby, así como contra con iluminación LED. Pero también es muy importante ajustar la potencia contratada a las necesidades reales, tanto por uso como por horarios.
¿Cuánto se tarda en ver los resultados económicos de la eficiencia energética?
Sólo con cambiar la potencia contratada, una compañía puede ahorrar entre 500 y 2.000 euros al año. En la factura de la energía es donde primero podemos ver el ahorro que supone implantar protocolos de eficiencia energética. Para notar ese descenso en los standby, se tarda algo más de año y medio, y para notarlo en los equipos de iluminación, estaríamos en 2 años y medio. El 76% de las empresas analizadas no disponen de equipos de baterías de condensadores que controlen al 100% su energía reactiva (el 69% de las inversiones son rentabilizadas en menos de 4 años)